La actualización del Plan de Acción de Biodiversidad (PAB) 2016-2030 de Colombia representa una oportunidad crucial para redefinir nuestro enfoque hacia la protección de la biodiversidad —biológica y cultural— y la contención de las diversas crisis civilizatorias, incluida la climática. Nuestro objetivo como organizaciones de la sociedad civil es proteger la trama de la vida, entendida como una red compleja de relaciones e interdependencias donde los seres humanos somos una parte integral; pero no la única ni la más importante. En este contexto, diversas organizaciones socioambientales han dado lugar a una serie de recomendaciones conjuntas para la actualización del PAB.
Organizaciones de la sociedad civil participantes en la COP16 de Diversidad Biológica, hacemos un llamado urgente a construir una nueva relación con la naturaleza, reconociendo nuestra interdependencia con ella para proteger la vida en todas sus formas. Rechazamos la financiarización y mercantilización de la vida, la economía verde, y defendemos vínculos basados en la reciprocidad, la equidad y la justicia. Exigimos:
En esta tercera versión de la revista Voces por el Clima, unimos voces juveniles, feministas, indígenas, afrocolombianas, académicas y de organizaciones sociales y ambientales, desde diversos rincones de Colombia y de la región, para posicionar y debatir la forma cómo se puede emprender una justicia climática.
Las diversas crisis que hoy nos afectan como especie, nos reafirman la necesidad de realizar diversas transiciones socioecológicas, entre ellas la transición energética. A pesar de ser una de las más necesarias por el sentido de urgencia que despierta la crisis climática y su efecto devastador en todos los sistemas que conforman nuestras sociedades, esta transición está cayendo bajo enfoques y fines corporativos que no reivindican los motivos por los cuales anunciamos y sentimos, desde la evidencia territorial, vivencial y científica, que estamos en una crisis.
Lograr acercar la ciencia ciudadana a la cotidianidad resulta un tanto utópico si se piensa en la diversidad social y territorial de la que somos parte. Para muchas personas, es un gran reto conectarse con la esencia de la vida mediante pequeñas pero significativas acciones, debido a la inmediatez y velocidad en la que estamos inmersos globalmente que nos distrae y desconecta de un ejercicio tan sencillo como respirar conscientemente y valorar la buena calidad del aire.
Más allá de transformar la matriz energética, necesitamos transiciones profundas para superar las crisis socioecológicas que vivimos. Mujeres pensadoras y activistas proponen enfoques ecofeministas, reflexiones y procesos concretos para enfrentar las causas de la crisis y transitar hacia formas de vida y organización política más justas, diversas y ricas.